El Regalo de La Vida - Inspiración Semanal -

El Regalo de Vida
Por Rebeka Piña Dormido en el corazón del Amor Cósmico, Nonato... Universal... Lleno de potencial, reposa el Cristo infante, La gran Alma de la Madre Universal, ama a su bebé nonato concebido en la quietud de su Naturaleza Universal, impartiendo Su propio ser en él.
- Ernest Holmes, La Voz Celestial
Tratar el tema de nuestras madres por lo general plantea fuertes emociones. Puede venir acompañado tanto de alegre anticipación como de gran tristeza; o de todas las emociones que puedan existir entre estos dos extremos del espectro. El Día de la Madre es una celebración que puede llegar frecuentemente acompañada de cargas emocionales como el resentimiento y la culpa. Algunas personas pueden sentirse culpables o inadecuadas en estos días. Algunas veces la culpa es por no saber cómo lidiar con una madre difícil, enferma, anciana, o emocionalmente ausente. Algo que también puede suceder con una madre que ya dejó este plano. Otras veces la emoción dominante es el resentimiento porque la madre que tuvimos no es (o fue) como nosotros creíamos que debería haber sido.

En muchas partes del mundo, especialmente en los países latinos, se ha idealizado el papel de la madre perfecta, y suele ponérsela en un pedestal. Esto es una gran carga tanto para la madre como para los hijos, la vida en el pedestal es difícil para todos. Es muy cansado mantener una posición en donde no se perdona imperfección alguna, y en la que se espera que los hijos sean también perfectos y vivan eternamente pegados a sus faldas. Para mantenerse en esta posición, con frecuencia las madres tienden a dar de más y a olvidarse de sí mismas por completo; lo cual ya sabemos que no es lo más saludable para nadie. Porque quien da todo a los demás, tiende a descuidarse a sí mismo. Otro peligro en el que pueden caer, es en tratar de controlar todo, y a todos.

Puede ser muy liberador comprender que estos ideales de madre perfecta son fantasías y mitos perpetuados por el inconsciente colectivo a través de libros novelas, televisión, películas, y de una amplia serie de promociones comerciales por parte de los medios de comunicación. Pero posiblemente, el mundo de la fantasía es el único lugar donde existe la familia perfecta.

Si en lo que se refiere a la relación con nuestra madre nos encontramos enfrentando la desilusión de expectativas no cumplidas, podemos elegir cambiar esas expectativas y agradecer el regalo que sólo nuestra madre pudo darnos: ¡el regalo de la vida!

Ellas hicieron posible la transición segura para que nuestra alma pudiera ser introducida del ámbito de lo invisible al visible. Ellas fueron el medio por lo cual el Espíritu Infinito pudo tomar forma en nosotros. Así como la tierra es el medio en que la semilla crece, el útero de nuestra madre fue la cámara nutritiva para nuestra entrada a la vida. Nuestra gratitud para el regalo de la vida puede ayudarnos entonces a sanar lo resentimientos o dificultades que podamos tener en la dimensión humana con nuestras madres. Ya sea que sepas la identidad de tu madre o no, ya sea que ella viva o que ya haya hecho su transición; que esté en buenos términos emocionales con ella o no, siempre será verdad que tu madre te dio el regalo precioso de tu vida, y tu gratitud por este regalo tiene el poder de permitirte sanar los resentimientos y acallar los juicios y percepciones que hayamos hecho, y que nos impiden experimentar y expresar nuestro propio sentido inherente de plenitud.
AFIRMACION
AFIRMACIÓN: AMO A LA MADRE QUE ME TOCÓ Y LA ACEPTO TAL COMO ES (O COMO FUE) LA BENDIGO POR EL REGALO PRECIOSO DE MI VIDA Y TODA CULPA O RESENTIMIENTO SE DISUELVEN... ¡Y ASÍ ES!